No creo en el día de San Valentín, si uno ama, ama todos los días. No entiendo el prototipo que impusieron las grandes empresas de inventar un solo día para regalar y amar. Si uno realmente ama, no tiene que demostrarlo con un obsequio. Puro marketing. Desde mi postura, no quiero seguir alimentando el consumismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario